Cada trimestre Android pasa a dominar y arrastrar más el mercado. Los beneficios siguen de parte del iPhone, pero la tendencia es clara e inequívoca.
La cuota de ventas de iOS sube cuando hay nuevos modelos, y baja en los intermedios de los ciclos anuales. Es una ley que lleva con nosotros desde de hace 4 o 5 años cuando en el mundo empezaron a asentarse los smartphones en la sociedad de forma decisiva.
Ha habido pequeñas variaciones e irregularidades en el patrón, como un iPhone 5s de iPhone especialmente bueno en ventas, pero ninguno como el gran recorte que hizo Apple con el iPhone 6 y 6 Plus hace año y medio. Apple por fin atendía la necesidad definitiva del mercado: smartphones más grandes. Y de ahí surgió una demanda oculta del iPhone, que llevó al iPhone a cotas inimaginables. El iPhone 6 fue a la vez una exclamación para Apple, pero también una interrogación: ¿Y ahora qué?
El iPhone 6 devolvió el crecimiento en cuota, pero el iPhone 6s se ha visto incapaz de mantener el nivel
Su sucesor, el iPhone 6s, aunque líder de ventas, está viéndose incapaz de mantener el nivel de ventas. No por malas, claro. Simplemente Apple no ha podido acceder a esa demanda oculta de algo “nuevo” que el iPhone 6s diera a los dueños de un iPhone 5s o un iPhone 6. Los datos del trimestre anterior y las expectativas de Apple para el actual ponen negro sobre blanco a la situación. El iPhone 7 será …