PlayStation VR llega como la alternativa de la realidad virtual para las masas. No es, desde luego, el mejor casco de realidad virtual, pero ofrece la experiencia más solida de todas las que hemos probado. Aunque su catalogo es limitado, sirve perfectamente para ver qué tal se desenvuelve Sony en su apuesta de llevar la realidad virtual a cada salón en el que haya una PS4.La industria del videojuego está cambiando. Del modelo generacional de consolas de sobremesa a las mejoras incrementales y el creciente interés, renovado, por el PC de alta prestaciones dedicados al juego, unido a la caída de los precios en algunos de sus componentes, ha replanteado algunas bases de la industria. El futuro del videojuego, por tanto, está más que asegurado para el corto plazo.
Sin embargo, el largo plazo para una industria que cada día atrae a millones de jugadores no está tan clara. No tanto por su asegurar su éxito, más bien por el cambio en las bases con las que el jugador se relaciona con medio: nuevas narrativas, nuevas formas de contar historias, mecánicas. Aun así, las formas de interacción con el medio, quitando algunas excepciones que han caído en desgracia, como Kinect, se han mantenido intactas, al menos para el grueso de los juegos.
Ahora estamos a las puertas de lo que la industria (y tímidamente algunos usuarios) está llamando el futuro de los videojuegos: un cambio en la forma de contar historias, pero más importante, un cambio en la forma en …