He estado probando el Airtame, un pequeño gadget HDMI con wifi que básicamente permite duplicar la pantalla de cualquier dispositivo en un televisor u otra pantalla de gran formato. De este modo el tradicional problema de los «cables imposibles» e inoportunos, principalmente en salas de reuniones, aulas y centros de control, pasa a resolverse «sin hilos», a través de wifi. No es pues tanto una solución para el «entretenimiento digital personal» (para eso están Chromecast o AirPlay, con sus limitaciones) sino más bien de una opción pensada para entornos y redes corporativas.
La idea detrás del Airtame es fácil de entender, y su instalación requiere poco más que el plug-and-play: conectar el gadget a una entrada HDMI de la pantalla (o incluso VGA o DVI, si se tiene un adaptador) y enchufarlo con su cable micro-USB al adaptador de corriente (o a un USB del monitor). Como el gadget no es tan pequeño como el conector típico de los cables puede tener problemas para encajar si no hay mucho espacio; el fabricante lo ha tenido en cuenta y en la caja se incluye un cable alargador HDMI para evitar esta situación.
e instalar el software en los ordenadores o dispositivos que vayan a «emitir» las imágenes. Lo mejor: el software de Airtame es completamente multiplataforma y se puede descargar en versiones para MacOS, Windows, Linux, Chrome y también como apps para iOS y Android.
Acto seguido basta abrir el software y conectar con la misma red wifi que el …