La animación es una de las ramas del cine con más historia y relevancia, pues desde su nacimiento, ha servido para impulsar temas de narrativa y por supuesto tecnológicos. Por un lado tenemos a toda la escuela occidental encabezada por cosas como Disney y Warner Bros., y por el otro a un sin fin de estudios orientales, la mayoría de ellos con raíces japonesas. Cuando hablamos de dibujos animados nipones mejor conocidos como anime, resulta inevitable no hacer referencia a todo el legado de Studio Ghibli.